Hoy entra en vigor la nueva Ley Hipotecaria, la Ley 5/2019, de 15 de marzo, reguladora de los contratos de crédito inmobiliario.
Aunque podríamos comentar muchos puntos de esta nueva norma, señalar en primer lugar, que esta Ley tiene por objeto establecer determinadas normas de protección de las personas físicas que sean deudores, fiadores o garantes, de préstamos que estén garantizados mediante hipoteca u otro derecho real de garantía sobre bienes inmuebles de uso residencial o cuya finalidad sea adquirir o conservar derechos de propiedad sobre terrenos o inmuebles construidos o por construir.
Esto es, principalmente, su principal objetivo, garantizar la protección de los consumidores a la hora de rubricar un préstamo hipotecario con una entidad de crédito.
Entre las garantías de los consumidores la nueva Ley Hipotecaria establece unos requisitos más estrictos de las condiciones de solvencia para reducir las posibilidades de impago.
A la pregunta, de si seguirán existiendo las cláusulas suelo, el artículo 21 de la nueva Ley da respuesta al establecer que: El tipo de interés del préstamo no podrá ser modificado en perjuicio del prestatario durante la vigencia del contrato, salvo acuerdo mutuo de las partes formalizado por escrito, y que en las operaciones con tipo de interés variable no se podrá fijar un límite a la baja del tipo de interés.
Hay muchas novedades y modificaciones a la manera de operar hasta ahora a la hora de pedir un préstamo hipotecario.
Quien quiera puede consultarnos a este respecto sobre alguna duda que le surja y estaremos muy satisfechos de poder atenderle.
